Nuestras fichas habían cambiado de lugar, Ramphel era más humano y habíamos salvado a los personajes del cuento de Amelia Earthart.
Un conejito vino a visitarnos y nos adentró en el bosque con un lobo que hablaba un poco raro: “Voy a comedte”
En el bosque había muchos sonidos, distintos paisajes sonoros que creamos, interpretamos y dirigimos junt@s.
Una de las características del lobo es que era impaciente, quería comerse al reto de los animales y no sabía esperar. Así que tocamos bailamos e interpretamos con instrumentos de pequeña percusión el El Reloj Sincopado de Leroy Anderson
Un día nos visitó un cocodrilo que habitaba en el bosque y comía coco. Para lo que utilizamos esta dinámica de Jorge Jiménez.
También utilizamos los vasos de Oriol Ferré y disfrutamos acompañando distintas bases musicales.
Este disparate de cuento disparatado nos presenta las bulerías de Miguel Poveda ¡Qué disparate!
Las cuales acompañamos con el cajón flamenco y nos invitan a dibujar disparates y compartirlos con el resto de compañer@s.
El MAESTRO Martín descubre nuestro entorno sonoro con instrumentos como el piano y la elaboración de otros nuevos con material reunificado.
Cierto día, unos papás y mamás nos descubrieron la verdadera historia de este lobo “Voy a Comedte” de Jean-Marc Derouen y Laure du Faÿ.
¿Habremos superado el reto?
Aún no lo sabemos. Lo que tenemos claro es que el MAESTRO Martín se merece un aplauso y todo nuestro agradecimiento por tanto como nos ha enseñado a tod@s.
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